4 motivos que están impidiendo que consigas una entrevista de empleo

Publicado el: 20/nov./2019

Buscar empleo puede ser una experiencia frustrante, especialmente cuando las oportunidades más deseadas terminan por no rendir frutos y las llamadas a entrevista son escasas. Todo el peso emocional de este proceso puede desanimar a los candidatos, haciendo que la búsqueda por el empleo ideal se vuelva cada vez más exhaustiva. 

Si no te llaman a muchas entrevistas de empleo, debes saber que el problema puede estar en la forma en la que buscas las vacantes y te comunicas con los reclutadores, y no necesariamente en tu experiencia profesional. 

Afortunadamente, las dos posibilidades que explican la dificultad de conseguir una entrevista de empleo tienen soluciones prácticas. Vamos a mostrarte cómo hacer que tu próxima búsqueda de una oportunidad profesional sea más asertiva, impactando directamente el número de invitaciones a charlas con los reclutadores. 

Primero, piensa en el tipo de profesional que eres

Toda tu historia profesional impacta tu desempeño durante la búsqueda de empleo: la relevancia de las empresas por las que pasaste, los cargos que ocupaste, cuánto tiempo pasaste empleado o desempleado. Además de eso, factores como educación, cursos y tu pregrado también son llevados en consideración. 

Con esa información, es necesario tener una mirada más estratégica a respecto del profesional que eres y del camino que deseas emprender en el mercado de trabajo. Busca desarrollar los puntos que te pueden hacer menos competitivo y realza lo que te destaca de la competencia. 

Descubriendo puntos a mejorar

Si tienes dificultad para conseguir una entrevista, pero confías en tu experiencia y en tus habilidades profesionales, es muy probable que estés haciendo algo de manera equivocada. Conoce algunos consejos:

1.Tu currículum no está bien elaborado

El currículum es como una fotografía de toda tu experiencia y de lo que puedes hacer profesionalmente. Muchas veces, es por medio de este documento que el reclutador hará un primer análisis, pudiendo rechazar tu candidatura inmediatamente o clasificarte para la próxima fase. 

Sé estratégico y garantiza que tu currículum transmita la información necesaria para posicionarte como un buen candidato. Da información de manera sucinta y objetiva, pero haz que el reclutador entienda tu potencial y el valor que tu trabajo podría traerle a la empresa.

Un consejo importante es siempre adaptar tu currículum para cada vacante de empleo para adecuarse a lo que buscan los reclutadores. Ese tipo de personalización también demuestra más cercanía cultural con la empresa. 

2. Tus correos electrónicos o cartas de presentación tienen que mejorar

Puede parecer anticuado, pero los campos “cuéntanos sobre ti” o incluso los correos electrónicos que envías para postularte son importantes para tu desempeño. 

Si no demuestras tener buena comunicación y mostrarte verdaderamente interesado en la oportunidad de trabajo, puede ser que eso sea usado como un criterio negativo a la hora de contratarte o de decidir que continúes en el proceso. 

Por eso, prepara un buen texto de presentación que cuente quién eres y cuáles son tus objetivos profesionales. El mismo consejo del ítem anterior vale aquí: adapta y personaliza esa información para cada candidatura, modificando el contenido según el perfil de la empresa y la especificidad de la vacante.

3. Estás transmitiendo una imagen equivocada

Puedes ser un profesional con experiencias cohesivas y que se conectan con lo que se espera para el cargo, pero transmitir una imagen negativa puede acabar con las posibilidades de conseguir una entrevista de empleo. 

Todos los textos que envías, tales como tu currículum, tu carta de presentación y las respuestas de las pruebas serán analizados y tomados en consideración a la hora de llamarte a una entrevista o de dejar de hacerlo. 

Este tipo de juicio se hace para filtrar candidatos que no son apropiados a la cultura de la empresa. Cuida también tus redes sociales, principalmente el LinkedIn, pues estas pueden ser consideradas en el análisis.

4. Estás apuntándole a la cantidad y no a la calidad

La búsqueda de empleo no debe hacerse disparando a todos lados. Debes gastar tu tiempo siendo asertivo y seleccionando apenas las vacantes que condicen con tus experiencias y con tu perfil profesional. 

Muchas oportunidades requieren que llenes formularios, que hagas pruebas y que respondas preguntas sobre tu carrera y tu comportamiento. Responder todo consume un tiempo precioso. 

Ese tiempo podrías aprovecharlo mejor con otras actividades, como buscando vacantes más relevantes, haciendo cursos online e incluso trabajos extras como freelancer, oportunidades que van a sumarte más conocimientos y habilidades para tu currículum.

Fuente: https://www.glassdoor.com.mx

Otras Noticias